Así como la forma de vestir, la barba dice mucho de un hombre. Hay una gran variedad de tipos y formas para escoger según tu estilo, pero en todo caso, lo más importante de la barba es lucirla aseada y arreglada. Así que ¡aprende aquí sencillos trucos!
Si has decidido lucir barba, lo primero que tienes que tener en cuenta es que debes dedicarle tiempo en mantenerla cuidada. Además, la limpieza no tiene que ver únicamente con la apariencia física, sino que también es un tema de salud, pues debes saber que en la barba se acumulan un sinfín de bacterias.
Ahora bien, lee y aplica estos sencillos hábitos en tu rutina para mantener tu barba bien cuidada y aseada:
- Lávala diariamente. Hay hombres que incluso prefieren limpiarla dos veces. En todo caso, usa un jabón especial para la barba y aplícalo de manera descendente, para evitar enredos que hagan que el pelo se rompa al cepillarla. Ah, y no olvides secarla bien para quitarle el exceso de humedad.
- Hidrátala con aceites. Existe un mito de que al aplicar aceite en tu barba, esto provocará que luzca grasienta y ¡no es así! Aplicar un buen aceite o bálsamo no sólo hará que se vea sana, sino que también cuidará de tu piel. Coloca unas 4 o 5 gotas en la palma de tus manos y masajea tu barba.
- Péinala. Con un cepillo preferiblemente de cerdas de jabalí, peina tu barba, eso te ayudará a regular la grasa de tu rostro y de tu barba, logrando así una piel más sana.
- Fíjala. Para que tu barba quede en su lugar, debes fijarla. Esto dependerá de la longitud de la misma y de cómo quieres que luzca, pero puedes usar un aceite o bálsamo para fijarla levemente o aplicar cera y evitar así que queden pelos sueltos.
Sencillo, ¿no? Bien sabes que lucir impecable toma su tiempo, pero el resultado final siempre vale la pena cuando te sientes cómodo contigo mismo.